La modernidad y el lujo pasando por el desierto y el mar hacen vida en esta urbe. Descubre que hacer en Dubai.
Dubái se relaciona inmediatamente con riqueza y poder, pero para visitarla y disfrutarla no necesariamente hay que ser millonario. El modernismo marca tendencia inevitable con sus enormes rascacielos, parques de atracciones, centros comerciales y restaurantes de todo tipo.
Dubái es enorme y es la puerta de entrada a otros destinos, como por ejemplo países del Medio Oriente. Para pasarla bien, te dejamos en este artículo los lugares y actividades imperdibles que debes realizar cuando la visites.
ARRANCA LA AVENTURA
Una de las cosas espectaculares y soñadas es disfrutar del desierto. Para ello hay la posibilidad de contratar un safari por la arena roja y contemplar el atardecer en medio de las dunas. Los guías y conductores le suben el máximo al vértigo y al final podrás tomar una buena comida. Ya cuando cae la noche y vas de regreso, la imagen de la luminosidad de las avenidas de la ciudad impactará tu visión.
Ahora cambiamos radicalmente el destino y nos dirigimos a Marina Beach, una playa de arenas blancas y buenas vistas, ideal para disfrutar del sol y del mar. Para salir del calor y refrescarse un poco esta es un referente. O lo puedes complementar con el Parque Acuático Aquaventure, al que debes cancelar una entrada pero que realmente vale la pena.
Y un tercer aspecto en este primer recorrido, son las islas artificiales Palm Island y The World. El lujo y la extravagancia se juntan en estas estructuras hechas por el hombre donde se han utilizado millones de metros de arena para levantarlas.
CITA CON LAS ALTURAS
Como te relatábamos al principio, los rascacielos son una de las cosas que identifican a Dubái. Así que no dejes de pasar por ellos.
El más impresionante de los edificios es el Burj Khalifa que se alza sobre 828 metros y tiene un veloz ascensor que te puede llevar rápidamente hasta el piso 148. Cuenta con un mirador que para acceder debes comprar un boleto. Es una experiencia única ver desde las alturas el desierto que lo rodea.
Ahora vamos al considerado hotel más alto del mundo, su nombre es Burj al Arab con sus 321 metros de altura. Se clasifica con 7 estrellas y tiene su propia isla artificial.
Y ahora date un paseo por un enorme centro comercial, te hablo del The Dubai Mall que agrupa 1.200 tiendas y restaurantes. Aunque no es tan elevado, pues solamente cuenta con tres plantas, vas a necesitar de mucho tiempo para recorrerlo. Es un paraíso para los turistas.
LUGARES IMPORTANTES
Esta parte del viaje la comenzamos en la Mezquita Bastakiya, que muestra un color blanco que se combina con el resto de las edificaciones. Se localiza en el Barrio histórico Al Fahidi, lugar donde habitaban los mercaderes persas a finales del siglo XIX y tiene callejuelas en las que es un placer perderse. Igualmente podrás toparte con algunos interesantes museos.
Otra mezquita importante es la Jumeirah en la que se ofrecen visitas guiadas todos los días de la semana. Es un reflejo de la arquitectura islámica en el país.
Ahora sigue un paseo por el Dubái Creek en el que puedes trasladarte a las épocas pasadas mientras navegas a bordo de una barca tradicional.
Debes apartar un espacio para ir al Dubai Museum, que se localiza en un edificio levantado en el siglo XVII y en el que se puede conocer la historia de esta ciudad. Hay colecciones de todo tipo y objetos arqueológicos e históricos.
Luego sigue para el acuario, que está entre los más grandes del mundo y tiene en exhibición varios tiburones oro. Alberga unas 140 especies marinas y ofrecen experiencias extravagantes para ver muy de cerca estos animales como subirse a un barco de cristal.
Ahora es el momento de ir de compra a alguno de los mercados que se consiguen en Dubái. Está el de las especias donde encontrarás una gran variedad además de muchos productos tradicionales. O el del oro que es uno de los centros principales de economía en la región. Si no vas a comprar nada, eso no es problema, puedes pasar largo rato mirando en los exhibidores.
Y vamos a cerrar dando un vistazo a las fuentes danzantes que están en el Burj Khalifa. Son las más grandes del mundo con 275 metros de altura y el espectáculo está acompañado por música árabe contemporánea. La entrada es libre, pero como van muchas personas debes llegar un poco temprano.